El consejero de educación del gobierno catalán, Josep González-Cambray, ha confirmado que el próximo curso retirará el 25% de clases en castellano en las 47 aulas de Cataluña en las que se está aplicando por dictado judicial.
De esta manera, el consejero no solo estaría incumpliendo la sentencia que avala el derecho de familias y alumnos catalanes a recibir como mínimo un 25% de horas lectivas en español, sino que también acaba con ello donde ya se impartía. Cambray lo hace amparándose en la Ley pactada entre el separatismo y el Partido Socialista de Catalunya (PSC), junto con la izquierda neopodemita de En Comú.