El Govern de la Generalitat de Cataluña anunciaba ayer la creación de un cuerpo de funcionarios destinados a la “Acción Exterior” lo que supone, camuflado bajo esa denominación, la creación de un cuerpo diplomático catalán que ejercerá funciones de relaciones internacionales a imagen y semejanza del cuerpo diplomático español.
La Consejera Serret declaraba que ese nuevo cuerpo de funcionarios integraran la perspectiva internacional en todas las consejerías del Gobierno.
Desde hace años que la Generalitat destina importantes partidas del presupuesto público a la creación de las llamadas embajadas catalanas, más de 20 ya, una parte importante de ese objetivo que es crear estructuras de Estado para una futura independencia de la región.
Según la nota de prensa, en ese nuevo cuerpo de funcionarios tendrán cabida, podrán colocar, a “personas que hasta ahora no encontraban su encaje laboral en la Generalitat y que ahora tendrán la oportunidad de incorporarse en un grupo mucha más específico” lo que parece llevar a que será un cajón de sastre de colocación de personas del entorno separatista.
El líder de los liberales en Cataluña, Carlos Carrizosa, ha advertido a través de sus redes sociales, que no dudará en impulsar “todas las acciones legales y parlamentarias necesarias para denunciar esta ilegalidad”
Carrizosa les recuerda que la competencia en relaciones internacionales es exclusiva del Estado, como establece la Constitución. En su tuit les señala el artículo de la Constitución que recoge las competencias exclusivas.
Y el mensaje es también una advertencia para Sánchez y para el votante socialistas, avanzando que les dejará hacer lo que quieran aunque vulneren las leyes.
