El Gobierno de Francia ha ordenado la disolución de la organización ultracatólica Civitas por los mensajes de odio vertidos contra judíos, musulmanes y ciudadanos LGTBI e incluso alentar una “guerra contra la República”.
El portavoz del ejecutivo Oliver Veran ha lamentado en rueda de prensa que para la asociación ultracatólica los derechos humanos simbolicen la destrucción de la civilización cristiana, lo que no tiene cabida en Francia