Como ya anunciábamos, Feijóo decidió no asistir a la manifestación convocada por Escuela de Todos en defensa del español como lengua vehicular. El líder de los conservadores delegó en Gamarra la representación del PP, aduciendo que tenían un acto interno.
La realidad es que Escuela de Todos comunicó a los partidos a finales de julio que el 18 de septiembre convocarían una manifestación en defensa del bilingüismo y contra la imposición de una inmersión lingüística que ha expulsado al español de las aulas gracias a la ley pactada con los socialistas.
Arrimadas, que sí acudió a la manifestación, dijo no sorprenderse de la ausencia de Feijóo por las políticas lingüísticas que lleva aplicando en Galicia hace años y que relegan al español .
Con casi dos meses de antelación, era tiempo suficiente para que el líder popular modificara su agenda y priorizara su asistencia a la manifestación. Pero no lo hizo. Es más, según fuentes internas, el acto del PP no estaba cerrado a finales de julio. Esta información, relevante, supondría lo que se comenta en los burladeros políticos, que Feijóo no tuvo nunca intención de acudir a la manifestación por no molestar a sus futuros socios nacionalistas.
Ayer, mientras 200.000 personas gritaban en el centro de Barcelona “Basta Ya”, Nuñez Feijóo se paseaba por las calles de Toledo con su equipo de comunicación. Un paseo tranquilo, con el que pretende dar una imagen cercana, según las mismas fuentes, mostrando que tenía otras ocupaciones.
El PP ha optado, ante la convocatoria de la manifestación, por la estrategia que ya utilizó el PSC en 2017 y que tan malos resultados le dio. Con el fin de no enfrentarse al separatismo y mantener abiertas las puertas de los pactos con ellos, ha enviado una delegación de tercera regional a la manifestación. Nadie podrá decir que no estuvieron. Pero todos podrán decir que no ayudaron a la movilización, no convocaron a sus bases y prefirieron ignorar la defensa del Estado de Derecho optando por la estrategia política de futuros pactos con los que vulneran las sentencias y dinamitan la democracia española.
Entre un paseo por Toledo y la defensa del español, Feijóo ha optado por el paseo.
